Un interruptor, un enchufe o una llave de luz puede ser una obra de arte. Este pensamiento, que podría habernos parecido absurdo la primera vez que lo dijimos en voz alta, se convirtió en todo lo contrario; una motivación para crear algo nuevo, algo único. Nacía así Davincia, un proyecto inspirado en la genialidad de Da Vinci, probablemente el artista más versátil de la historia. El gran genio ha inspirado nuestro nombre, y también nos identifica en esa búsqueda continua de nuevos retos y de innovación en un oficio milenario.